Me he puesto a pensar nada más levantarme de la cama, que la vida es como un profundo sueño, del que de un modo u otro y en cualquier momento podemos despertar. Nos dormimos cuando nacemos y nos despertamos al morir. Pero... ¿Es justa la vida? Gran parte de nuestra vida la dedicamos a crecer y aprender, y cuando nos damos cuenta tenemos arrugas, y comenzamos a disfrutar verdaderamente de ella. Pero en ese momento empiezan los dolores de lumbagos, las visitas al médico constantes, las pastillas que te destrozan el estómago... cuando comenzamos a disfrutar de la vida, somos personas mayores, y la vida ya se ha ido. Por eso amigas y amigos, disfrutad de la vida mientras vais aprendiendo, porque cuando despertéis al menos podréis haber tenido un maravilloso sueño, y no una pesadilla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario